Comida Típica

Los hábitos alimenticios determinantes; hábitos que tienen como base nutricional los productos que se obtienen en la zona y de sus capacidades productivas tales como la caza de animales y aves silvestres, la pesca, etc. Los procesos de cocción autóctonos y predominantes son los denominados maitos, que son tapados de carnes y cocidas a fuego lento en hojas de la zona; carnes de animales silvestres, peces que son ahumadas o cocidas, complementariamente se acompañan estos productos con el verde, yuca o chonta entre los más importantes; la bebida tradicional es la chicha de chonta o yuca, que se procesa de manera ancestral; esto es, masticando y fermentando en hojas de platanillo o plátano para luego ser servidas con agua en recipientes caseros denominados “pilches o mates”; estos constituyen su régimen alimenticio de manera cotidiana.

Los grupos de colonos incluidos los indígenas y mestizos, han incorporado en sus hábitos alimenticios, los productos que se obtiene en el mercado de productos semi-elaborados o elaborados que en muchos casos han sustituido o se complementan con los productos que se obtienen tradicionalmente en la zona, lo que ha ocasionado la pérdida parcial de los hábitos ancestrales.

PLATOS TÍPICOS.

Maito de Bocachico, Tilapia, Sábalo y Cachama.- Este exquisito plato, es preparado con pescado de agua dulce de cualquiera de estas variedades; después de salir a pescar proceden a prepararlo, sazonándolo con sal y en algunos casos acompañándolo con el palmito; se cubre con hojas de plátano, toquilla o platanillo y luego se expone al fuego del asador.

Maito de Guanta. De la misma manera es preparado con carne de guanta producto de la actividad de la cacería que realiza el hombre de la comunidad; es sazonado con sal y en ocasiones con maní y verde; lo cubren con hojas de plátano y lo colocan en el fuego.

Pincho de Mayón. Este afrodisíaco plato es preparado con el gusano que es sustraído de los árboles podridos como el papayo, el papayuelo, el morete, la palma, (etc.); los pobladores locales conocen el momento cuándo este gusano está en su punto; lo sazonan con sal, le atraviesan con pullas de pambil y lo colocan en el fuego.